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Cultivado a 1900 metros sobre el nivel del mar, con semillas especiales, cosechadas de forma manual y seleccionadas minuciosamente, hemos evolucionado para producir un café de la más alta calidad, cuidando al máximo el medio ambiente.
Un café polinizado por nuestras propias abejas, criadas y mimadas en la propia finca, colaborando en la obtención de una de las mejor cosechas de Colombia.
El manto de las nubes del cielo de Belén de Umbría, en el centro del eje cafetero colombiano, madura nuestro café, dulce, balanceado, sin estrés.
En nuestra finca BUENVISTA, producimos un CAFE ESPECIAL, único y con un sabor digno de los mejores paladares, con puntuación en taza de 89 puntos, HeBé , ha nacido para satisfacer los paladares más exigentes, y acercar a los mortales, una bebida de Dioses.

Situado a más de 1.900 mtrs. sobre el nivel del mar, nuestro Teleferico del Café recorre la finca haciendo varias paradas por diferntes puntos, haciendo de la labor de cosechado y transporte una tarea no solo mas fácil, si no efectiva y concisa sobre la calidad de nuestro grano.
Directamente según es recolectada la cereza del cafe, es cargada en las diferentes cabinas del Teleferico, siendo transportadas de manera rapida de la mata a las tolbas de procesado.
Esta labor mecanizada hace que los tiempos de manipualción se minimicen y la calidad y frescura de nuestro Café sea excepcional.
Directamente según es recolectada la cereza del cafe, es cargada en las diferentes cabinas del Teleferico, siendo transportadas de manera rapida de la mata a las tolbas de procesado.
Esta labor mecanizada hace que los tiempos de manipualción se minimicen y la calidad y frescura de nuestro Café sea excepcional.
En nuestra finca BUENAVISTA, no solo plantamos y cosechamos... todo el proceso necesario para llegar a su paladar, son parte de nuestro sueño y de nuestro empeño diario.
Arte, tecnología y sabiduría transmitida por varias generaciones, conforman nuestro trabajo y nos llenan día a día de entusiasmo por crear un Café inconfundible.
La Tostación es la transformación de los granos de café verde mediante la aplicación de calor, lo que origina varios cambios físicos y reacciones químicas que desarrollan todo el aroma y sabor de la apreciada bebida.
Inicialmente el grano absorbe calor y pierde la humedad y algunos gases. Luego ocurre el “primer crack” con un sonido como de crispeta (maíz tostado) o “palomitas de maíz”. A partir de ese momento el grano crece en tamaño y comienza a tomar un color oscuro por la caramelización de los azucares conformando los más de 800 compuestos químicos que tiene el café tostado.
La transformación de los azúcares simples y aminoácidos, que le otorgan al café la mayoría de sus mejores propiedades aromáticas y su color característico, se conoce como la reacción de Maillard. Finalmente, y dependiendo del grado de tostación deseado, puede haber un “segundo crack” y se presenta una reacción exotérmica (que libera calor). A partir de ese momento es necesario reducir la temperatura aplicada con agua o con aire frío para obtener exactamente el color y sabor deseados. Las reacciones químicas en el interior del grano continúan por algún tiempo (horas o incluso días) después de que el grano ha salido del tostador, durante el cual el café tostado continúa emitiendo CO2. Es por esta razón que las técnicas de empaque deberán tener en cuenta la liberación de dichos gases.
Existen diversos niveles y técnicas de tostación que se adaptan a los gustos y preferencias de diferentes consumidores y mercados. Es así como en ciertos mercados como en Norte América y los países escandinavos prefieren niveles de tostación baja o media con los que se pueden experimentar en detalle las características de origen del grano, y en otros mercados como en la cuenca del Mediterráneo prefieren cafés con tostaciones altas en las que se siente más el “carácter” del la tostación en sí, con menor presencia de notas ácidas y florales de origen, pero mayor cuerpo.
Existen diversos niveles y técnicas de tostación que se adaptan a los gustos y preferencias de diferentes consumidores y mercados. Es así como en ciertos mercados como en Norte América y los países escandinavos prefieren niveles de tostación baja o media con los que se pueden experimentar en detalle las características de origen del grano, y en otros mercados como en la cuenca del Mediterráneo prefieren cafés con tostaciones altas en las que se siente más el “carácter” del la tostación en sí, con menor presencia de notas ácidas y florales de origen, pero mayor cuerpo.
